Bienvenidos al Devocional de HOY
Juan el discípulo amado, escribió su evangelio para dar un aporte peculiar al registro de la vida del Señor; este libro es complementado y suplementado por Mateo, Marcos, y Lucas. Juan escribió para convencer a sus lectores de la identidad verdadera de Jesus como el Dios encarnado que es Jesucristo el Mesías. Aunque este libro parece simple y claro, las verdades reveladas en este, son profundas.
Este capitulo, el cual tiene como titulo “La Purificación del templo” revela el cumplimiento de Malaquías 3:1-3 en el cual el Mesias es llamado Fuego purificador. También se cumple la palabra de Zacarias 14:20,21 en el que que habla de la santidad a Jehova.
Jesus subió a Jerusalén y encuentra el templo como “una casa de mercado” en vez de un lugar de adoración. Jesus dice: “no hagáis de la casa de mi Padre casa de mercado.” Se puede traducir del imperativo griego como:”dejad de hacer” que indica que Jesus le ordenaba que abandonen sus obras actuales.
Luego se cita el Salmo 69:9, el cual David escribió mientras estaba siendo perseguido a causa de su celo por la casa de Dios y la defensa de su honor. El temor que los discípulos era debido a que Jesus fuera a pasar una persecución similar. Pero Jesus en este momento, dejo bien claro que no permitir la irreverencia hacia Dios.
En lugar de adoración, hacían mercado.
La santidad a Dios incluye la santidad en la adoración. En que esas ocupando tu tiempo de adoración? Cuántas veces en lugar de dar a Dios, ocupamos el tiempo de nuestra adoración en actividades que nos otorgan ganancias propias y materiales!
La acción de estas personas delataban el hecho de que no tenían una relación con Dios como deberían haberla tenido. Cuando en vez de ir a la casa de Dios a adorarlo, vamos con la intención de conseguir alguna ganancia propia, esto indica que hay una desconexión entre Dios y nosotros. La raíz de esta clase de actitud es falta de devoción, reverencia, e importancia a la santidad de Dios. Si no te consume la falta de reverencia a la presencia de Dios, entonces falta intimidad en tu relación con Dios.
El tempo de Dios es casa de Oracion. puerta del cielo, es donde nos reunimos a adorar a Dios. Cuando vamos a la casa de Dios, todo lo que hagamos tiene que darle gloria a Dios y tratarse de Jesus y no de nosotros mismos. Esto no es aplicable solo a la casa de Dios, sino a la presencia de Dios. Estas personas podían usar cualquier otro lugar para hacer sus ventas, pero usaron el templo de Dios porque ya estaban indiferentes a la santa presencia de Dios.
No podemos decir: “el celo de tu casa me consume” si nosotros mismos estamos siendo indiferentes a la presencia de Dios.
Hoy quiero animarte a que si tu corazón se ha desprendido de los asuntos de Dios, si ya no sientes tristeza por lo que pasa o deja de pasar en la casa de Dios, si no te duelen las almas perdidas, si has estado dandole mal uso al lugar de adoración a Dios; abandona lo que estas haciendo. Abandona tu yo que te convence de hacer cosas que alimentan tu carne y que adormecen tu espíritu, haciendo insensible a la voz del Espíritu Santo. Jesus quiere purificar tu corazón hoy, y llevarse todo lo que no le agrada. Jesus quiere limpiar tu corazón de todo aquello que no viene de Él, pero que le has dado lugar en tu corazón. Hoy, Jesus te dice: Abandona.
ORACION FINAL:
Escribe tu propia oración en los comentarios o simplemente habla con Jesus ahi donde estas.
Cerca de ti está la palabra, en tu boca y en tu corazón. Esta es la palabra de fe que predicamos:
que si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo.
Porque con el corazón se cree para justicia, pero con la boca se confiesa para salvación.
Pues la Escritura dice: Todo aquel que en él creyere, no será avergonzado.
romanos 10:8-11 RVR1960
