PARTE 2/2
Feliz Dia!
Bienvenidos al Devocional de HOY
BUSCA TU BIBLIA Y EMPECEMOS!
““Llegó adonde estaba, le curó las heridas con vino y aceite, y se las vendó. Luego lo montó sobre su propia cabalgadura, lo llevó a un alojamiento y lo cuidó.” Lucas 10:34 NBV
El buen samaritano
Esta parábola es la respuesta de Jesus a una pregunta hecha por un escriba , la pregunta fue: “quién es mi prójimo?”
A nosotros se nos hace fácil amar a aquellos que nos aman, a nuestra familia, y amigos. Sin embargo, el sacrificio que el amor de Dios en nosotros conlleva es amar a aquellos que según esta sociedad, no tenemos que amar. Permíteme explicarme mejor.
Jesus dijo:
“Si amáis a los que os aman, ¿qué mérito tenéis? Porque también los pecadores aman a los que los aman.”
Lucas 6:32 LBLA
Amar a quienes nos aman es fácil de hacer, pero para amar a quienes nos rechazan, traicionan, atacan, o a quienes no conocemos; necesitamos el amor de Dios en nosotros. Necesitamos el amor que describe Pablo en 1 Corintios 13:
“El amor es paciente, es benigno; el amor no es envidioso; el amor no es presumido ni orgulloso; no se comporta con rudeza ni es egoísta ni se enoja fácilmente ni guarda rencor; al amor no le gustan las injusticias y se regocija cuando triunfa la verdad. El amor disculpa todos los errores, siempre confía en la persona amada, espera de ella lo mejor y todo lo soporta.”
Yo me pregunto: ¿Que detuvo a aquellos otros dos hombres de ayudar a una persona moribunda ? El sacerdote y el levita ambos tenían posiciones altas delante de la sociedad y eran respetados por todos. Yo creo que quizás sintieron miedo por el que dirán. Tal vez se sentían demasiado santos para ensuciarse ayudando a aquel hombre, o quizás simplemente su corazón ya estaba repleto de sentimientos tales como orgullo, altanería, y altives hasta el punto que era imposible que sintieran compasión.
Me llama la atención, que un samaritano, que quizás pudo identificarse con el rechazo que había sentido toda su vida por ser samaritano, tuvo compasión de este hombre.
“Si me amáis, guardad mis mandamientos.”
S. Juan 14:15 RVR1960
Amor al prójimo
El amor de Dios en nosotros nos mueve a ayudar a nuestro prójimo. Mientras más buscamos a Dios, más perceptivos y sensibles somos a la necesidad ajena. Porque cuando nos acercamos a Dios su Espíritu Santo obra en nosotros que nuestro yo va menguando y Jesús va aumentando; de modo que podemos ver y sentir la verdadera necesidad que tienen aquellos que nos rodean.
Cada persona en esta tierra es nuestro prójimo a quien debemos amar y ayudar. Sin importar título, posición, raza, color de piel, etc. No hay mejor manera de predicar a un Dios que envío a su hijo a morir por todos nosotros por amor, que a través de nuestros hechos .
El amor de Dios no conoce barreras.
Hoy te reto a que ayudes a una persona, en cualquier área que puedas y que ella/el necesite. Vamos a demostrar el amor de Dios en nosotros a todos los que nos rodean!
ORACION FINAL:
Padre Santo, gracias por hablar a mi vida en este día. Hoy te pido que me ayudes a demostrar tu amor en todo lo que haga. Ayúdame a enseñarle a alguien hoy que hay un Dios que le ama.
Cerca de ti está la palabra, en tu boca y en tu corazón. Esta es la palabra de fe que predicamos:
que si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo.
Porque con el corazón se cree para justicia, pero con la boca se confiesa para salvación.
Pues la Escritura dice: Todo aquel que en él creyere, no será avergonzado.
romanos 10:8-11 RVR1960
